Para poder dar ternura se necesita confianza y seguridad en uno mismo. El que es fuerte y no necesita defenderse puede abrir las compuertas de la ternura.
Envía un mensaje a los organizadores y participantes en la quinta Reunión del Foro de los Pueblos Indígenas, organizada por el FIDA, asegurando que “solo con humildad de espíritu podremos ver la derrota total del hambre y una sociedad basada en valores perdurables”.
Nos cuesta ceder el paso, darle atención al otro, buscarle un lugar a quien lo necesita. La vida se ha tornado una competencia desenfrenada por conquistar lugares, por subir a lo más alto, no importa que se tenga que aplastar a los demás.
Ir educando nuestra capacidad de desear para que no nos atrapen los deseos egoístas, sino que podamos cumplir los que nos llevan a entregarnos generosamente.