El Evangelio que anunciamos las mujeres. “Una gran familia llamada humanidad”

Domingo 30 de diciembre
“Una gran familia llamada humanidad” (Lc 2, 41-52).

Vivimos en un mundo adulto-centrista, donde solemos tener como certeza que los padres y madres son los que enseñan, educan y crían a los niños, que el hecho de haber vivido más les otorga algo así como una autoridad incuestionable.

Sin embargo, es provechoso mirar cómo los niños nos educan. En el Evangelio de hoy domingo, día en que celebramos la Fiesta de la Sagrada Familia, Jesús, deja ver un modo renovado de ser y estar en el mundo. Él, como niño, naturalmente se lanzó a compartir su talento y su vida según la Ruah le iba inspirando. Se pierde de sus padres, María y José, al no verle cerca, sienten angustia, pero Jesús no se siente perdido, estaba donde debía estar, compartiendo sus dones con todos quienes le oían.

¿Qué sucedería si mirando el modo de Jesús, nosotras viviéramos compartiendo nuestra vida y nuestros dones?, ¿si abriéramos los brazos como Él en la cruz? ¿Cómo sería este mundo si camináramos teniendo presente la hermandad que nos une como humanidad?

Hoy la Sagrada Familia nos inspira a cuidarnos como María cuidó de Jesús, a buscar a los hermanos que se han alejado, a sabernos y tratarnos como familia. Nos interpela a ser hogar, sobre todo, para quienes son más marginados. Nos invita a poner el foco en lo que nos une y a abandonar lo que nos divide. Derribar los muros, las fronteras, todo aquello que nos aísle. Destruir las estructuras injustas que nos deshumanizan.

Y en su lugar poner una gran mesa redonda que nos permita ofrecer lo verdadero: nuestra humanidad y divinidad. Que, entregando nuestros talentos, nos anime a tomarnos de las manos, a hacer una ronda y tener la valentía y el coraje de construir un nuevo mundo que sea hogar para la gran familia llamada humanidad.

* ¡Queridas amigas y compañeras de ruta, queridos amigos! Con alegría comunicamos que seguiremos compartiendo con ustedes, semana a semana, una reflexión al Evangelio dominical. Este nuevo periodo, inició el primer domingo de Adviento y se extenderá hasta el último domingo del año litúrgico 2019. Sentimos necesario dar continuidad a este espacio de expresión para mujeres que se dejan interpelar por La Palabra. Con esto buscamos visibilizar la acción de la Ruah —La Espíritu— que anima nuestras vidas y comunidades en la construcción del Reino. Pueden encontrar todos los comentarios anteriores en Facebook, Mujeres Iglesia Chile, y en la página de la Revista Mensaje: https://www.mensaje.cl/category/noticias/iglesia/

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Fuente: https://www.facebook.com/MujeresIglesiaChile/