No faltó tampoco el miércoles, como en cada audiencia general, Ángelus y alocución pública, el pensamiento del Papa Francisco por la “martirizada Ucrania”, para la que ha pedido oraciones con el fin de que la paz prevalezca sobre el conflicto que siembra muerte y destrucción desde el 24 de febrero.

LUZ Y CONSUELO

“Que el Niño de Belén les dé su luz y su consuelo”, dijo Francisco durante su saludo a los fieles italianos reunidos para la cita del miércoles en el Aula Pablo VI. De ahí la invocación al Señor:

“Que Él conceda a la martirizada Ucrania, oprimida por la brutalidad de la guerra, el anhelado don de la paz”.

“CONSUELO PARA LOS CORAZONES ATRIBULADOS POR LA GUERRA”

Ya en su saludo a los fieles polacos, el Papa había mencionado el conflicto en Ucrania.

“Que el amor de Dios revelado en Belén traiga consuelo a nuestros corazones, turbados por el drama de la guerra en Ucrania y en otras partes del mundo”, dijo. “Recordemos que en la historia de la humanidad la última palabra pertenece a Dios, porque ‘todo pertenece al amor’”, añadió el Pontífice, enviando su bendición a todas “las familias polacas y ucranianas que se encuentran actualmente en vuestra patria”.

“En la historia de la humanidad la última palabra pertenece a Dios, porque ‘todo pertenece al amor’”.

ESCASEZ DE ELECTRICIDAD EN EL PAÍS

Mientras tanto, en la capital, Kiev, y en otras ciudades de Ucrania, la situación sigue siendo difícil debido a la falta de electricidad. Los residentes tendrán que esperar repetidos y repentinos cortes de electricidad hasta el final del invierno, ya que el suministro eléctrico se ha visto interrumpido por los ataques con misiles rusos. Las mayores complejidades se dan en los días laborables, cuando aumenta el consumo. Sobre el terreno, las sirenas antiaéreas han vuelto a sonar en toda Ucrania, donde continúan los ataques de las fuerzas armadas rusas. Las sirenas sonaron en Kiev y en la región de Mykolaiv, en el sur del país. Según informaciones procedentes del este, el mando ruso ha abandonado Kreminna, ciudad ocupada de la región ucraniana de Luhansk, y algunos civiles rusos que habían acudido a la ciudad para trabajar también han huido. Entretanto, el Presidente ruso, Vladimir Putin, firmó el decreto de respuesta a la introducción de la “price cup” del petróleo. El texto prohíbe la venta de crudo y productos petrolíferos a los países adheridos a la “price cup” durante cinco meses, prohibición que entrará en vigor el 1 de febrero.

Fuente: www.vaticannews.va / Imagen: Pexels.