Xabier Pikaza, doctor en Teología, lleva años escudriñando en el sentido de esta afirmación: «La Biblia no separa al hombre en alma y cuerpo, sino que lo toma de un modo unitario. Tiene una antropología unitaria».
| 27 de marzo de 2017
Páginas
Suscríbete a Revista Mensaje y accede a todos nuestros contenidos