El Gobierno de Colombia y el Ejército de Liberación Nacional vuelven a negociar la paz

La tregua unilateral anunciada por la guerrilla facilitó el voto ciudadano el domingo. El Gobierno afirma que en meses puede lograrse la paz.

Luego de una escalada de violencia que llevó a interrumpir las negociaciones de paz y luego de la tregua unilateral decretada por la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN), que facilitó las operaciones de voto llevadas a cabo el domingo 11 de marzo, el presidente Juan Manuel Santos anunció que las partes vuelven a sentarse a la mesa del diálogo.

El mandatario destacó que el ELN cumplió con la tregua anunciada durante la jornada electoral. Por otro lado, analizando la situación, Santos concluyó que “la paz, como ya lo vimos con el proceso con las FARC, tiene el mayor beneficio de todos: ¡la paz salva vidas!”.

Se constató que, durante los comicios legislativos, no hubo registro de perturbación al orden público a manos de esa organización; y era el tipo de acciones que estaba esperando para tomar la decisión de volver a enviar a Quito, donde se lleva a cabo el proceso de paz, a la delegación del Gobierno. “Es con gestos como este como el ELN puede reconstruir el mínimo de confianza que se requiere para avanzar en el camino del diálogo”, afirmó Santos.

Sin embargo, Santos reconoce la división que se ha creado en el país en torno al rumbo de las conversaciones de paz con la guerrilla, pues varios sectores le han pedido levantarse de la mesa, al tiempo que la Iglesia, varias organizaciones sociales y defensoras de derechos humanos, voceros de los pueblos indígenas y afrodescendientes, así como la comunidad internacional, han abogado por el diálogo.

La decisión ha sido la de volver a negociar y avanzar en la definición de los puntos de la agenda previamente acordada a la instalación oficial de la mesa de paz. Es decir, el de la participación ciudadana y el de las acciones y gestos humanitarios que se deben dar para ayudar a construir la paz. El objetivo será lograr un nuevo acuerdo de cese al fuego y de hostilidades verificable.

“El diálogo, como algunos sostienen, no es sinónimo de debilidad. Todo lo contrario: es un acto de responsabilidad, de valor, es una acción de compromiso con el presente, pero, sobre todo, con el futuro de los colombianos”, recordó Santos, quien afirmó que la firma de un acuerdo de paz con el ELN podría darse en meses”.

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Fuente: http://ciudadnueva.com.ar

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