Este es un texto, como reconoce su autor, en gran medida motivado por el llamado del papa Francisco a acoger en una nueva sinodalidad, teniendo a la vista que “hacer sínodo significa caminar juntos en la misma dirección”: en este caso, buscando cómo asumir las nuevas contribuciones de las ciencias para que las personas homosexuales sean acogidas.
El padre Tony Mifsud nos entrega un libro lleno de esperanza, que rezuma y resume mucho del Evangelio en lo que toca al difícil tema de la desolación que tarde o temprano, de forma más profunda o menos toca el corazón de todo creyente. Vale la pena leer este libro para conocer y reconocer este estado espiritual.